Orizaba | 2020-10-18 | Nora Gabriela Lira
Debido a las complicaciones económicas que ya traían y luego agudizadas por la pandemia, así como la corrupción que ha permitido que prácticas fuera de la ley persistan, las cooperativas de autotransporte agonizan, indicó Ignacio Paz Hernández, empresario del ramo.
“Lo que ha estado en este momento pasando en el transporte público ha sido que hay una corrupción muy amplia que se ha extendido, es una gran mentira que se diga que la corrupción no existe, lo que ha pasado es que han dado la oportunidad de que todo mundo se meta sin hacer un estudio socioeconómico y más que otra cosa lo que ha sucedido es que ha permitido, con todo el acceso de concesiones que dieron a la modalidad de taxis, que ellos hagan transporte colectivo”, indicó.
Señaló que hay 20 o 30 carros haciendo colectivo en La Perla, hasta 153 mototaxis en Atzacan, y esto ha pegado grandemente a los transportistas por toda la complicidad que hay en Transporte Público, que es el que debería meter orden para que acabar con esas prácticas que están prohibidas en la ley.
Indicó que además de ello el pulpo camionero entra a esas rutas, de nuevo con la complicidad de Transporte Público, para reventar a las empresas y hasta ofrece una tarifa a la mitad de los otros.
Por el contrario, indicó, para la zona de Ixtaczoquitlán hay una serie de retenes y cualquier unidad que no es de esa ruta, ahí sí los paran.
Agregó que por todo ello, así como la baja que se ha tenido en el número de usuarios por la pandemia y los que hay se los quitan los colectivos, las cooperativas, como Atzacan y La Perla, están “boqueando”.
Comentó que incluso algunas habían adquirido nuevas unidades y las tuvieron que regresar porque ya no podían pagarlas.
“Es muy difícil la situación porque un carro anda sobre un millón 380 mil pesos, y con la baja que hay de ingresos no sale ni para pagar la mitad”, apuntó.
Destacó que el pulpo camioneta busca adueñarse de las rutas para después poner las tarifas que quieran.