Río Blanco | 2021-01-21 | Nora Gabriela Lira
Una ciudadana de Río Blanco denunció de manera pública el acoso que ha sufrido por parte de personal del Instituto de Migración debido a que un vecino de manera recurrente “alerta” a las autoridades de que hay migrantes en su vivienda, por lo que gente de esa dependencia ha tratado de ingresar a su domicilio en la colonia Modelo de Río Blanco.
La señora Irene Ramírez Álvarez, quien vive en la calle Ferrocarril, entre Camerino Z Mendoza y 12 de Octubre, en el número 58, señaló que hay una persona con la que constantemente han tenido conflicto porque ella ofrece ayuda a los migrantes dándoles comida económica y consiguiéndoles ropa cuando necesitan, lo que molesta a ese señor porque de acuerdo con los mismos centroamericanos les vende comida o un espacio para dormir a precios altos y muchas veces le pagan y no les da cambio, sabiendo que no pueden recurrir a ninguna autoridad.
Mencionó que la noche del miércoles llegaron unos 10 jóvenes y tuvieron problemas con esa persona porque no les devolvió un dinero, entonces fueron a pedirle ayuda, lo que motivó ese vecino llamara a policías estatales de Río Blanco, porque a los 10 minutos había elementos de Seguridad Estatal que acudieron con ella para decirle que había recibido una queja de que tenía migrantes escondidos.
“Esa acción molestó a mis hijos, que fueron a reclamarle al señor por qué siempre se mete con ellos, pero a los pocos minutos llegaron patrullas de Orizaba y al ver que no hubo nada se retiraron, pero como a las 20 minutos vino Migración y le tomaron fotos a mi casa, siendo que no tenía yo nadie adentro más que mi familia”, señaló.
La señora indicó que vieron como el personal de Migración se llevó a un menor como de 10 años, pero al rato regresó el papá y la camioneta se fue, aunque regresó luego de unos 20 minutos y ante los reclamos de la gente bajaron al niño y éste se pudo reunir después con su papá.
“Estoy molesta porque le tomaron foto a mi vivienda, esto pasó a las 2 de la mañana, Migración llegó como a las 4 de la mañana, pero no es la primera vez, hace como dos años se metieron a mi casa, la segunda vez sólo se pararon en la puerta, pero golpearon a dos hondureños”, señaló.