Mariano Escobedo | 2020-04-28 | Staff Imagen de Golfo
A través de las redes sociales es como se enteran las autoridades municipales de lo que está ocurriendo en el tema del COVID-19, pero en ningún momento hubo una capacitación para los alcaldes o su personal para que supieran qué protocolos activar cuando se dieran casos en sus municipios, lo que podría considerar una irresponsabilidad por parte de la Secretaría de Salud, indicó el presidente municipal de Mariano Escobedo, Baldomero Montiel Estévez.
“Se supone que la gente de Salud son los expertos y como expertos ellos nos tienen que decir cómo enfrentar esta situación. Aún así, no hemos omitido nuestra responsabilidad, hemos estado informando a la ciudadanía a través de lonas, de redes sociales, de la radio de cómo ellos tienen que actuar y cómo nos debemos cuidar todos”, indicó.
El alcalde mencionó que no se omite su responsabilidad como autoridad municipal, pero en ocasiones siente que las dependencias “como que nos tiran la bolita”.
Recordó que desde el sábado intentó contactar con la Jurisdicción Sanitaria número cuando se conoció que en el municipio había una persona infectada con el virus, pero no les quisieron dar información, primero les dijeron que les daban datos el domingo, luego que el lunes y finalmente solo les dijeron que era en las unidades habitacionales y que ellos ya tenían el caso en control y era una persona que estaba aislada en su municipio.
Mencionó que ante ello se decidió contratar a una empresa que realiza acciones de sanitización y que cuenta con los permisos necesarios.
Puntualizó que a pesar de que los recursos del municipio son raquíticos, pues este año les quitaron un millón de pesos en su presupuesto, hacen el esfuerzo y se sanitizarán todas las unidades y colonias de la cabecera municipal.
Dijo desconocer si en algún momento habrá alguna acción por parte del gobierno del estado o el federal, los cuales deberían apoyar en algo a la población, pues es en momentos como éste cuando hacen falta los recursos, ya que no tiene caso ahorrar si no de aplica el dinero cuando la gente lo necesita.