Nanchital | 2022-09-15
A la opinión pública: C. Esmeralda Mora Zamudio
Presidenta Municipal de Nanchital Ver.
Presente
Quienes suscribimos esta carta, todos : trabajadores activos de diferentes medios de comunicación, con años de trayectoria informativa y plenamente identificados ante la sociedad, manifestamos nuestro completo repudio a la situación que se vive en el municipio de Nanchital, donde vivimos y ejercemos nuestra labor como comunicadores, por lo que en pleno uso de nuestras facultades y ejerciendo nuestro derecho a la libertad de expresión, puntualizamos lo siguiente:
Durante las últimas semanas, hemos sido objeto de ataques enfocados a temas personales y críticas destructivas hacia nuestra labor como comunicadores que evidentemente emanan del gobierno municipal que usted encabeza y el pueblo de Nanchital es testigo de ello.
Nunca, en la historia de Nanchital se habían vivido situaciones mediáticas de esta índole: páginas falsas que se dedican a atacar a quienes representamos los verdaderos medios de comunicación; páginas de Facebook hechas a modo para denostar el trabajo informativo que realizamos diariamente y a la vez ensalzar la labor de la presidenta municipal y una granja de boots al servicio de su gobierno, dedicados a mofar , denigrar, hostigar, perseguir, calumniar y exhibir sin fundamentos la vida privada y profesional de quienes representamos a los medios de comunicación en esta ciudad.
La realidad no se puede ocultar y salta a todas luces la fallida estrategia de imagen y comunicación social implementada desde el inicio de su administración municipal, misma que ha recrudecido durante las últimas semanas y que se ha enfocado en desacreditar a los medios de comunicación y a título personal a los comunicadores que respaldamos esta misiva.
La invitamos a que reconsidere su estrategia y nos brinde un trato de respeto y cordialidad .
Ser portavoz del pueblo y hacer pública la realidad que se vive en Nanchital, tal parece que nos ha convertido en sus enemigos y no es necesario que exista un convenio publicitario hacia las empresas periodísticas como muchas veces han argumentado al momento de publicar una nota que les disgusta, para lo que acto seguido comienza la guerra mediática contra quienes realizan la publicación e incluso, contra la sociedad misma que se atreve a opinar.
Nuevamente, de manera respetuosa le pedimos señora presidenta, reconsiderar lo mal que le está resultando esta estrategia de comunicación social que indudablemente nos deja muy mal como municipio sureño y exigimos respeto a nuestra labor periodística y que ordene un alto para que podamos ejercer libremente nuestro derecho a la libertad de expresión, pues estamos viviendo una época represora, de persecución y desprestigio como parte de su programa de manejo de imagen.
Nosotros no somos responsables de la manera de hacer política del gobierno que usted representa, pero si somos responsables de informar de manera precisa y oportuna lo que acontece todos los días en nuestro municipio.
No se confunda, no hay mejor evaluación para el trabajo de un político que la crítica de la ciudadanía y esa se logra positivamente, únicamente haciendo bien su trabajo para el que fueron electos, no intentando callar a los medios de comunicación de la manera que está ocurriendo en este municipio.
Le solicitamos, brindarnos una respuesta a la presente durante los siguientes 5 días hábiles a la entrega de la misma y otorgar fecha y hora para sostener una reunión, pues estamos convencidos que el diálogo el la mejor manera de entablar acuerdos.
¡Basta de la persecución mediática hacia las y los reporteros de Nanchital!.
Hacemos de su conocimiento que la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP ) ya tiene conocimiento de esta situación y a cuyo organismo solicitamos su intervención para que se defienda nuestro derecho a informar de manera libre y sin persecución.
Atentamente
Nanchital Ver. 15 de Septiembre del 2022
C.c.p. Silverio Quevedo Elox / Presidente de la CEAPP.
C.c.p. Israel Hernández Sosa/Secretario Ejecutivo de la CEAPP.