Catemaco | 2022-03-05 | Jorge Briones
Durante el festival tradicional de Catemaco, en el que brujos, chamanes y nahuales recorren las calles ofreciendo limpias y haciendo alarde de su cultura ancestral, no se observó la llegada de un gran número de turistas como en años anteriores.
Prueba de ello fueron los restaurantes localizados en la calle del embarcadero, que lucieron vacíos durante la noche del 4 de marzo.
El primer viernes de marzo es para los brujos y chamanes, habitantes de la región, no solo el día más mágico del año para potenciar las limpias y trabajos de magia negra y blanca, sino también para que visitantes de todo el país acudan a utilizar los servicios turísticos.
Esto no se observó este año. De acuerdo con comerciantes del lugar, a diferencia de otras temporadas en esta ocasión las calles ya no se convirtieron de “ríos” de personas participando de los recorridos.
Muchos de ellos atribuyen la baja afluencia de turismo a las medias sanitarias para contener los contagios por el virus SARS CoV-2; sin embargo, lamentaron que en algunos restaurantes y bares donde se aplican las medidas estrictas de prevención, solo pequeños grupos de personas hayan asistido y no se llegara al menos a la mitad de su capacidad.
Este viernes fue el primero del mes en el año 2022, el día en que se cree se mueve el mayor número de energías y se aprovecha para reforzar trabajos de magia negra y blanca, lo que año con año atrae turismo nacional e internacional; sin embargo, este año no pintó como se esperaba.