Orizaba | 2021-03-16 | Thelma Valerio
“Orizaba es una ciudad en la que se discrimina mucho, lo podemos ver todos los días. Las personas de las comunidades semiurbanas o rurales, que rodean la zona conurbada, llegan a la ciudad para vender productos en los mercados pero, al no encontrar espacios, deben hacerlo en la calle, donde constantemente viven experiencias de agresión y discriminación”, expresó Víctor Hugo Guzmán Cuevas, coordinador del Centro de Derechos Humanos Toaltepeyolo.
El activista detalló que, al no existir una regulación donde se contemplen a las personas que ejercen el comercio ambulante en Orizaba, esta actividad se criminaliza sin buscar la manera de respetar el derecho al trabajo, al libre tránsito y a la manifestación.
“La zona centro de Veracruz es una región muy diversa y convivimos personas de origen étnico y religioso diferente. Resulta muy difícil la vida para las personas que viven en zonas rurales, pues las desigualdades económicas y sociales son evidentes”, afirmó
“En muchas ocasiones, hay desprecio por parte de las autoridades y también por parte de la población, por lo que resulta riesgoso que las personas de zonas rurales vendan sus productos en las calles”, agregó.
En la zona conurbada interactúan varios pueblos originarios. Al sur, la Sierra de Zongolica, al norte, Ixhuatlancillo, La Perla y Mariano Escobedo. Estas comunidades enfrentan también grandes desigualdades en cuestión de seguridad.
“Muchas personas de las comunidades acuden a la Fiscalía Especializada de Orizaba, pero son víctimas de discriminación por parte de las autoridades que trabajan en estas instancias.
“Entonces, la diversidad, que es tan rica, se ha convertido en algo mal visto. Si alguien es diferente causa rechazo. Esto es muy complicado, pensamos que por ser el siglo XXI hay un cambio en la sociedad, pero no es así. El cambio no se ha dado y la transformación es lenta”, concluyó.