Agua Dulce Ver. | 2022-11-29
Seis personas lesionadas en su mayoría con quemaduras que no ponen en riesgo la vida, dejó el flamazo ocurrido durante las labores para tratar de controlar la fuga de etano en una línea de Pemex que cruza al ejido Miguel Alemán, ubicado en el kilómetro 28+900 de la carretera Costera del Golfo.
El material fugado se concentró sobre la red de distribución de ductos, por lo que se procedió a realizar una quema controlada, tras ocurrir la explosión y al considerar que ya no había peligro, ingresaron las cuadrillas para tratar de localizar la fuga y reparar la línea.
Sin embargo, cuando el personal especializado buscaba el punto de la salida del etano, se sobrevino un flamazo que no se tenía previsto, alcanzando a los obreros cercanos.
El personal que laboró narró que tan solo por el consumo del gas, el fuego superó los 40 metros de altura, convirtiendo en un verdadero infierno al poblado, por lo que por algunos minutos se tuvo que cerrar la carretera 180, también conocida como la puerta del sureste.
Los tres trabajadores de Pemex que resultaron con quemaduras, uno es de Cárdenas, otro de Minatitlán y Coatzacoalcos, ninguno de la sección 22, organismo sindical que tiene su sede en esta ciudad.
Por parte de los cuerpos de PC y bomberos municipales, los heridos fueron Tranquilo Arredondo (hijo del comandante de bomberos, Jesús Arredondo), Ismael Gil y el enlace de PC regional identificado como Oscar Cerrecedo.
Todos ellos ingresaron al hospital de Pemex de esta ciudad, en donde se activaron todos los protocolos, por lo que la totalidad del cuerpo médico se enfocó en la atención de emergencia a los lesionados.
Los lesionados fueron trasladados en ambulancias, pero también en las bateas de la camioneta de Pemex, debido que, al no haber suficientes ambulancias, los que tenían menos lesiones fueron llevados por sus propios compañeros.
Durante esta misma tarde, las inmediaciones del nosocomio ubicados en el bulevar Azteca, reciben los familiares y amigos de las personas heridas, para tratar de conocer su estado de salud, sin embargo, la información para ellos, también fue reservada.
Los marinos mantuvieron custodiado el hospital, mientras que las personas heridas eran atendidas al igual que una brigada de médicos acudió a la zona de la explosión, para atender a más de una veintena de obreros por intoxicación y crisis nerviosa.
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