Minatitlán | 2022-05-10 | Omar Vázquez
Entre sonrisas y con la voz entrecortada, en algunos momentos, María del Carmen Medina Ching recordó como tuvo que sacar adelante a sus dos hijas, después de darse la separación con el padre de ellas y quién decidió alejarse por completo.
Desde ese entonces se empleó en los pasillos del mercado "Miguel Hidalgo"; empezó desde cero para al paso de los años hacerse propietaria de un pequeño puesto de venta de pollos.
Recuerda que con amor, esfuerzo y cariño pudo sacar adelante a aquellas niñas de 7 y 13 años que se quedaron sin la figura paterna y sin la ayuda económica.
Así y bajo esas circunstancias se vinieron tiempos de lucha y carencias las que hoy le permiten ver a esas dos niñas convertidas en mujeres adultas.
Para ella la celebración del "Día de las Madres" es especial, rodeada del amor y cariño de esas mujeres que le reconocen todo lo realizado para que ellas tuvieran lo necesario en busca de un desarrollo.
Después de lo que considera como "un fracaso", nunca más rehízo su vida sentimental, y por lo contrario decidió entregarse 100 % a sus hijas.
“Con el negocio de pollería críe a mis hijas; empecé como empleada. En ese entonces yo ganaba 50 pesos diarios, mi esposo me abandonó cuando tenía 35 años, prácticamente yo saqué adelante a mis hijas”.
Recordó que 30 años atrás, cuando fue empleada y en el negocio para el que laboraba no le facilitaban la comida. Entonces, era allí a dónde tenía que comprar un plato de sopa con un costo de cinco pesos para poder comer y llevar a su casa y alimentar a sus hijas.
“la situación fue muy restringida, pero pude formar a dos mujeres con valores y principios”, explicó la comerciante en el marco de la celebración del “Día de las Madres”.
A tres décadas de distancia de aquella faceta, María del Carmen, dice entre lágrimas a punto de desbordar que se encuentra muy feliz por tener a dos mujeres extraordinarias y cariñosas.
“Ahorita trabajo para mí, estoy disfrutando un poco”, finalizó la comerciante y ama de casa.