| 2024-10-25
La casa de Clara Arano, una mujer de 47 años, está bordeada por el agua del río Papaloapan que se desbordó al costado de la carretera de acceso a la ciudad de Tlacotalpan.
La madrugada de este viernes el agua inundó su baño y amenazaba con inundar las otras recámaras de su casa de lámina y madera.
La situación de sus vecinos es peor, ya que dentro de las viviendas el agua ya les llegaba abajo de la rodilla y en el transcurso de las horas ven lentamente como sube el nivel.
Clara afirma que las familias más pobres, que viven en colonias como El Gas, son las que más sufren los estragos de la crecida del río en cada temporada de lluvias.
Pero al menos en los últimos seis años, esta es la primera ocasión en la que el agua ha subido más rápido y los mantiene a la expectativa de que ocurra lo mismo que en las inundaciones del 2010 y el 2018.
En su vivienda, vive con su esposo, sus tres hijos y dos de sus nietos. En el mismo patio del terreno donde está su casa, hay otros tres hogares también de lámina y madera, que son de su suegra y sus cuñados.
Todas están bajo el agua y usan una lancha para moverse de un lado a otro, si el agua sigue creciendo planean llevar los pocos muebles que tiene a la carretera, para evitar que los pierdan. Asimismo, instalan un toldo en el patio delantero, en donde el suelo es más alto y pasarían la noche si es necesario.
Otros de sus vecinos han optado por sacar algunas de sus muebles, ropas y documentos para pasar los próximos días en casa de familiares, en espera de que el nivel del río baje.
Clara Arano lamenta que hasta el momento, ninguna autoridad ha ofrecido ayuda para las familias pobres que ya sufren de afectaciones por inundaciones en la colonia El Gas.
Aunque en la cabecera municipal de Tlacotalpan, la crecida del río no ha provocado afectaciones importantes como en el acceso a la ciudad, en las localidades rurales se presentan inundaciones desde el pasado jueves.
El presidente municipal de Tlacotalpan, Luis Medina Aguirre, detalló que 85 por ciento de las 168 localidades rurales que pertenecen al municipio, presentan afectaciones por inundaciones.
Desde el mismo jueves que comenzaron a inundarse algunas casas, se distribuyó ayuda con despensas y se envió personal operativo, para ofrecer ayuda para desalojar las viviendas, pero por el momento ninguna familia ha aceptado ser evacuada.
El alcalde indicó que año con año se viven este tipo de afectaciones, por lo que lo único que queda es mantenerse al pendientes de las necesidades de la población y apoyar en caso de que requieran auxilio.
A menos de dos kilómetros de la casa de Clara Arano, las autoridades trabajan a marchas forzadas para construir un muro de contención provisional, con costales llenos de arena que se han colocado a lo largo del malecón para aminorar las afectaciones por la crecida del río.
En los trabajos participa personal de la Secretaría de Marina, del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional, el ayuntamiento de Tlacotalpan y algunos voluntarios.
El presidente municipal de Tlacotalpan, Luis Medina Aguirre, indicó que los ríos Papaloapan, San Juan y Tesechoscan han crecido su nivel en las últimas horas y la tendencia es que superen su Nivel de Aguas Máximas Ordinarias entre el sábado y el domingo.
El alcalde detalló que con el muro se busca reducir el impacto del desbordamiento del río Papaloapan, pues aunque se tendrán filtraciones, la Comisión Nacional de Agua (Conagua) podrá en marcha bombas de achique para sacar el agua y mantener el nivel controlado.
Asimismo, se suspendieron clases en todos los niveles educativos desde el pasado miércoles y las escuelas fueron habilitadas como albergues para las familias que lo requieran.
De momento, añadió el alcalde, no se prevé un panorama catastrófico como el que se vivió con las inundaciones del 2010, pero invitó a la población a mantenerse alertas a los avisos emitidos por las vías oficiales por parte de las autoridades.