Xalapa | 2022-01-10 | Adolfo Gómez
Pese al peritaje realizado por la Fiscalía General de la República (FGR), donde descartó abusos por parte de la policía de Mérida, Yucatán, en la detención del joven veracruzano José Eduardo Ravelo, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una nueva recomendación, en la cual afirma que sí hubo violaciones graves por parte de las autoridades de aquel estado.
“Con motivo de la investigación de los hechos, la CNDH contó con elementos suficientes para acreditar violaciones graves a derechos humanos a la vida, libertad e integridad personal y seguridad jurídica, con motivo de la retención ilegal y uso excesivo de la fuerza que derivó en tortura y como consecuencia la privación de la vida de la víctima, imputables a autoridades del estado de Yucatán y del municipio de Mérida”, expuso en un comunicado.
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En ese sentido, la Comisión emitió la recomendación 50VG/2022, dirigida a la Fiscalía de Yucatán y al presidente municipal. En esta, llama al fiscal general del estado a continuar las investigaciones sobre el caso, y determinar así la posible responsabilidad de funcionarios públicos, ya sea por ejecutarlas o por tolerarlas; además de coadyuvar con la FGR en la integración de carpetas por el delito de tortura, dar certeza a los afectados y dar seguimiento a las quejas al respecto.
Aunado a esto, deberá presentar un informe, en un plazo no mayor a seis meses, sobre las investigaciones hacia los elementos de la policía municipal involucrados en dichas conductas.
Por otro lado, a Renán Barrera, alcalde de Mérida, le pide dar una disculpa pública a los familiares de José Eduardo debido a las violaciones graves a sus derechos humanos; además de otorgar la reparación integral del daño y comprometerse a atender todas las quejas derivadas por este hecho, ya sea en contra de los elementos municipales, los jueces que revisaron el caso y los médicos encargados de certificar el estado de salud de la víctima.
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José Eduardo Ravelo falleció en Mérida, Yucatán, supuestamente tras haber sido detenido por elementos de la policía de ese municipio, acusando tortura y posible abuso sexual; el hecho se volvió de interés nacional, a tal grado que el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a la Fiscalía de la República hacer una revisión del mismo.
Los elementos de la policía de Mérida, supuestamente involucrados en la muerte del joven, fueron exonerados por las autoridades locales. Por su parte, tras investigar los hechos y realizar un estudio forense del cuerpo de José Eduardo, la FGR descartó que haya sido víctima de abuso sexual o de tortura, y descartó –tras revisar los videos de la detención- que en algún momento se haya dado algún uso excesivo de la fuerza o violaciones graves a sus derechos humanos.