Xalapa | 2021-12-11 | Leticia Cruz
Día y noche, en la calle, en el anonimato y frente a miles de ojos indiferentes, animales de compañía, principalmente perros y gatos, padecen maltrato y abandono. México figura entre los deshonrosos primeros lugares en animales maltratados, abandonados y en la calle; se trata de una realidad reflejada en datos registrados por diversas organizaciones locales-nacionales e internacionales.
Ante esta realidad de sufrimiento y maltrato animal, personas -por cuenta propia o agrupadas-, con sus propios medios y apoyo de donativos, ayudan animales en situación de calle, enfermos, maltratados, atropellados, violentados usados para peleas o para cruza-crianza clandestina para compra-venta; los ayudan a rehabilitarse y los resguardan en sus casas o en albergues fundados de manera particular o conformando asociaciones civiles.
El tema del maltrato animal es profundo y complejo.
En la región de Xalapa se hacen esfuerzos individuales y colectivos, en busca del bienestar animal. Pero la tarea aún es larga. Son pocos, falta cultura de respeto hacia los seres vivos humanos y no humanos; y el ser rescatista es un trabajo no remunerado económicamente.
Xalapa Animalista, Ayúdame a Regresar a mi Casa, Proyecto Arpa Xalapa, Albergue Ada Azul, Hogar Cuatro Patitas, Perritos Perdidos Xalapa, Amigos de los Animales, Maussi Rescate Animal, Patitas Suaves, son algunos de los rescatistas-protectores animales que, en la zona de Xalapa, diariamente trabajan por reducir el maltrato y la indiferencia social ante los animales maltratados, enfermos, abandonados o que deambulan extraviados.
A pesar de que en el estado de Veracruz hay una Ley de Protección Animal, la tarea es aún muy larga, sobre todo porque es poca la gente que apoya, compartió en entrevista para IMAGEN DEL GOLFO, Araceli Jiménez, rescatista independiente quien ha fundado el albergue "Maussi, rescate animal"
Pero Araceli enfrenta un problema, la falta de conciencia en torno al respeto hacia los animales, por parte de sus vecinos quienes, incluso, avientan piedras hacia adentro de su albergue, por lo que necesita mudarse. Pero los costos son cuantiosos al mantener el albergue, y requiere apoyo para poder encontrar un lugar costeable, en la zona de Coatepec, ya que en Xalapa hay más rescatistas que en el municipio vecino, donde Araceli trabaja en pro del bienestar animal.
"Yo necesito una casa que tenga un terreno muy amplio para que yo la adapte y pueda instalar el albergue. Normalmente busco en el área de Coatepec porque aquí o hay refugios, y en Xalapa hay muchas protectoras, pero aquí no, entonces por eso un espacio a donde pueda cambiar mi albergue porque tengo vecino muy agresivo con los animales y peligran bastante, sobre todo cuando yo salgo".
Por ello, Araceli lanzó un llamado a la sociedad, al sector empresarial y gubernamental, para que la apoyen en conseguir o facilitarle un espacio amplio para poder mudar su albergue y brindar mejores condiciones para sus animales, sin que ello le implique una renta cuantiosa, "porque no la podría costear".
"Hay muchas propiedades vacías que no sé por qué no las rentan o están desocupadas, y pues tal vez alguien tenga una sociedad así que nos pueda rentar a un costo accesible o simbólico, de esa manera apoyaría la causa de protección animal".
Araceli tiene más de 20 años trabajando por la protección animal. No ha abandonado la causa a pesar de dificultades que ha atravesado en su salud, en su vida personal y en su vida laboral-económica.
"Yo inicié en Perote y después por situaciones personales instalé mi refugio aquí en Coatepec y continué con mi trabajo ya de manera más profesional. Es una labor bellísima el poder ayudar a los animales, pero todos los rescatistas tenemos problemas económicos para poder rehabilitar, rescatar y dar en adopción. No mucha gente apoya y muy poca gente adopta, y si la gente no adopta se traduce en que los albergues se nos saturan y tenemos dificultades para mantener y atender a los animales, y no podemos rescatar a más".
Y es que como hay pocas adopciones de animales en albergues, los gastos siempre van en aumento. En cambio, siempre hay más animales que requieren ayuda.
"Son de las principales causas por las que siempre andamos padeciendo para poder tener recursos para tener alimento, poder costear los gastos de servicios médicos, de limpieza, renta, todas estas situaciones. El maltrato hacia los animales no ha disminuido, ahora con los medios de difusión sabemos de más casos, y la gente sigue abandonando sus animales".
El maltrato hacia los animales ocurre en todas las esferas sociales y por parte de gente de distintos niveles socioeconómicos, y en todos los pueblos y ciudades, lamentó Araceli Jiménez.
Son pocas las personas que ayudan a los animales o a los rescatistas. La mayoría de las veces las personas realizan reportes y son los rescatistas quienes acuden, pero son muchos los reportes, y los rescatistas no se dan abasto, así que en varios casos no pueden ayudar, por falta de transporte, de recursos y de espacio para poder apoyar a otros animales además de los que ya han rescatado.
"Hay casos que, por el tipo de maltrato, tenemos que ver cómo le hacemos, pero hay que rescatarlos forzosamente; en otros casos, lamentablemente como estamos saturados porque la gente no adopta, no podemos hacer nada, por eso siempre hacemos el llamado para que la gente ayude, que adopte, que apoye los refugios, que apoye a los animales en la medida de sus posibilidades".
Araceli ayuda a los animales que le es posible, porque "desafortunadamente en el municipio donde yo me encuentro, como no hay Centro de Salud Animal ni un lugar donde reportar, pues nosotros los protectores somos quienes tenemos que absorber los reportes y rescatar a los animales".
Sí, la falta de sensibilidad social y la mucha indiferencia social, sigue siendo el gran problema que, sumado a la crueldad de quienes maltratan animales en distintas formas, desde el abandono y la propia indiferencia, continúa reflejando una cruel realidad para perros y gatos, así como muchas dificultades para los rescatistas para poder continuar apoyando.
-¿De qué viven los rescatistas? porque hay gente que les juzga y se preguntan cómo obtienen recursos, sin conocer su labor-
-"De recursos propios, de nuestros empleos, de donaciones, de rifas, de subastas que hacemos para poder tener ingresos y así poder costear cuentas médicas y atención para rescates y rehabilitación de animales, y la renta del lugar donde se ubica el albergue. Es muy importante que la gente voltee a ver los pequeños refugios que, como el mío, lo sostenemos de recursos propios o de donativos de las personas".
Además, las tareas son muchas, hay que asear a los animales y el espacio donde habitan, por lo que además de apoyo económico para costear atención médica de los animales, los rescatistas requieren que se les apoye para bañar perros y gatos, y realizar limpieza general, pues la mayoría de los refugios tienen decenas de animales rescatados de calle y/o maltrato, refirió Araceli.
"A veces requerimos que alguien nos ayude a limpiar, y también requerimos apoyo para pagar a quien nos apoya con esa tarea, porque luego no hay voluntarios y necesitamos también ese apoyo".
Si la o el rescatista se enferma, enfrenta su propio problema de salud y la responsabilidad y preocupación en torno a sus animales rescatados, como le ocurrió a Araceli hace algunos años. Pero a pesar de la situación de salud que atravesó, se esfuerza por mantener su albergue y ahora hace un llamado a la sociedad para que se le apoye para conseguir un mejor lugar y a un costo bajo-simbólico para poder pagar la renta.
"Yo tuve una situación de salud que moralmente y físicamente me ha afectado bastante; sin embargo, gracias a Dios aquí ando y los tratamientos han ayudado bastante y puedo seguir adelante con mi labor que no pienso dejar hasta el momento que yo ya no pudiera, pero mientras tanto yo voy a seguir trabajando por los animales (...)Es muy importante que la gente se toque el corazón por los animales. Es entendible que cada quien quiere comprarse cosas, pero de verdad los animales requieren apoyo y en los refugios necesitamos ayuda para poder seguir ayudando a los animales (...) Hay veces que los rescatistas nos quedamos sin poder comprar algo que necesitamos, incluso sin comer, para poder costear tratamientos médicos y salvar animales, por eso todos los refugios, todos los rescatistas necesitamos apoyo, porque ese apoyo es para poder ayudar a los animales".
Además, el llamado de los protectores de animales es puntual a la sociedad: "que por favor adopten (...) hay muchos animales que requieren y merecen un hogar responsable y amoroso, porque los animales van a corresponder con amor. Pido y seguiré pidiendo a la gente que adopte animales, que no compren, hay cientos, miles de animales que requieren apoyo, que necesitan dejar atrás el maltrato, la calle, que necesitan un hogar. Si la gente adopta no solamente ayudan a los refugios, sino a los animales, es una cadena, un círculo, si la gente adopta y ayuda, nosotros los rescatistas podemos ayudar a más animales. Necesitamos que la gente adopte, creo que ese es el principal llamado que hacemos los rescatistas, aún más que donar, necesitamos que la gente adopte animales", acentuó Araceli Jiménez, quien fundó el albergue Maussi, Rescate Animal.
Además, ahora, ante las fiestas decembrinas, Araceli enfatizó su llamado a la población para que evite comprar animales y darlos como regalo, pues es necesaria la adopción responsable, ya que la mayoría de los animales obsequiados en navidad terminan en la calle medio año después, cuando dejan de ser cachorros, lamentó.
CIFRAS, CRUELES CON LOS ANIMALES
En México, el 70 por ciento de los animales padece situación de calle.
El 57 por ciento de los hogares mexicanos reportan tener una mascota, esto de acuerdo con cifras del Instituto nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
Dicho en otras palabras, del total de animales que hay en el país, sólo el 30 por ciento tiene un hogar.
Asimismo, los censos proporcionados por asociaciones protectoras de animales, advierten la cruda realidad que padecen los animales de compañía en México. Las cifras de animales en calle y maltrato aumentan cada año.
De acuerdo con Peta-Latino, cada año se incrementa en un veinte por ciento el número de animales en situación de calle, esto mayormente porque son abandonados y no son esterilizados por las familias ni por las autoridades.
"La vida de un animal callejero está llena de sufrimiento: muchos mueren de hambre, los atropellan, sucumben ante climas extremos, sufren de heridas y enfermedades que no son atendidas, o son maltratados cruelmente por los humanos. La única manera efectiva y humanitaria de reducir el número de animales que sufren de esta manera (no solo en México, sino en Latinoamérica y en todo el mundo) es esterilizar a los animales y nunca comprar de criadores o tiendas de mascotas", refiere Peta y sugiere que cuando una familia contemple incluir un animal de compañía, sea adoptado en un refugio.
La calle representa maltrato, enfermedades, hambre, sed, frío, violaciones tumultuosas a perras no esterilizadas y, por ende, la reproducción de animales en calle. La situación es la misma para los gatos.