Xalapa | 2022-10-13
En las inmediaciones de la Rectoría de la Universidad Veracruzana (UV), los alumnos de la institución que marcharon este jueves pidieron la expulsión de Daniel “N” conocido como “el colombiano”, o en su caso su “muerte académica” en la Facultad de Antropología.
Entre otras peticiones, expuestas en un pliego petitorio, criticaron que dicho estudiante haya amenazado con un arma blanca a sus compañeros: “Pedimos la expulsión o muerte académica del estudiante”, exigieron.
Igualmente anunciaron que los afectados ya presentaron la denuncia penal correspondiente ante la Fiscalía General del Estado.
El contingente de miles de universitarios se congregó debajo de las escalinatas y exigieron la presencia del rector, Martín Aguilar Sánchez, quien no atendió el llamado.
Criticaron que hasta el momento no ha habido respuesta por parte de la dirección de la Facultad sobre este caso, y que en el Centro de Desarrollo Humano Integral de los Universitarios se han ignorado sus peticiones.
A esto se suma lo que consideraron el mal manejo del personal del IPAX al interior del campus, acusando a elementos de reprimir a estudiantes que se manifiestan y de tomar fotografías de sus compañeros sin ningún tipo de consentimiento.
Como cuarto punto se expuso la necesidad de permitir libre comercio o trueques en la Unidad de Humanidades debido a que alumnos padecen afectaciones a su economía.
“Se expuso la necesidad de libre comercio e intercambio solidario, que es el trueque, ante las afectaciones económicas en la que muchos se encuentran por ser foráneos, madres solteras o por tener carencias que buscan un sostén económico que les permita continuar con su educación.
“Esto se debe a la represión por parte de la administración que no les permite realizar dichas actividades y se dirigen a estudiantes de manera intimidante. Solicitamos la apertura del portón trasero de la Unidad de Humanidades ya que muchos alumnos se encuentran en situaciones vulnerables”.
Además, solicitaron poder hacer uso de las aulas, evaluar a los medios de la consejería estudiantil y un protocolo de investigación a los candidatos, aparte de la apertura de elecciones extraordinarias si éstos presentan irregularidades públicas, privadas y penales.
“Se necesita una universidad verdaderamente incluyente y accesible para estudiantes con discapacidad, para una digna experiencia educativa, por lo cual exigimos atención puntual y próxima solución a cada una de las situaciones expuestas por parte del alumnado”.