Agua Dulce Ver. | 2021-06-24 | Miguel Á. Rodríguez
A doce años de haber colapsado el puente Tonalá I, personal de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) de Tabasco, supervisaron la estructura para conocer su resistencia y evitar otra tragedia.
Fue el 17 de julio de 2009, cuando 252 metros lineales de concreto cayó al río Tonalá y con ello dos tráileres y una camioneta que en ese momento cruzaban el puente, muriendo ahogados dos personas que quedaron atrapados dentro de sus vehículos.
El Tonalá I, era un puente de dos carriles sobre el cual miles de vehículos ingresaban al estado de Veracruz provenientes del sur del país; durante su reconstrucción de varios meses, la comunicación no fue suspendida, debido que la carga vehicular fue dirigido a su puente gemelo el Tonalá II, ubicado a más de 400 metro de donde colapsó el primero.
Ante los severos daños que dejó la caída del puente que incluso afectó la comunicación del sur con el centro del país, se reforzaron los protocolos de revisión periódica de la ‘mole’ de concreto.
Durante éste jueves, personal de la SCT, realizó diversos recorridos por toda la estructura, para detectar alguna deficiencia por muy minúscula que fuera.
De manera paralela, personal de la menciona Secretaría, realizaba trabajos de limpieza sobre la carpeta de concreto, con el objetivo de detectar alguna grieta o desnivel para que pudiera ser atendido.
Personal que realizó estos trabajos, adelantó a Imagen del Golfo, que el puente Tonalá I, se encuentra en buenas condiciones y no representa ningún tipo de peligro para quienes se desplazan por el paso elevado que cruza el río que separa a los estados de Veracruz y Tabasco.
El grupo de especialistas, agregaron que una persona parada sobre el paso peatonal del puente, puede percibir un ligero movimiento de la estructura al paso de las unidades pasadas, pero eso, es considerado como normal, debido a la conformación de las trabes que la sostienen.
El mismo personal, argumentó que tras concluir los estudios, se iniciarían con la supervisión del Tonalá II, el cual se estima tiene más de 45 años en servicio.