Veracruz | 2023-07-28
El Estadio Luis 'Pirata' Fuente, en el puerto de Veracruz, se llenó de emoción en dos ocasiones durante la temporada 2014-2015 del fútbol mexicano. Fue en esos momentos que uno de los futbolistas más icónicos y queridos del mundo, Ronaldinho, pisó el césped para deleitar a los aficionados con su magia y talento inigualables.
En la primera ocasión, correspondiente a la fecha 5 del Apertura 2015, el Querétaro, equipo donde militaba el astro brasileño, visitaba a un Veracruz comandado por el entrenador Carlos Reinoso y con un plantel lleno de figuras como Julio César Furch, Daniel Villalva, Gabriel Peñalba y Fernando Meneses.
El encuentro se mantuvo reñido hasta los últimos minutos. Los Rojos de Veracruz se adelantaron en el marcador gracias a un remate certero de Daniel Villalva al minuto 84.
Parecía que los puntos se quedarían en casa, pero en la última jugada del partido, Ronaldinho cobró un tiro de esquina preciso que encontró la cabeza de William, quien empujó el balón al fondo de la red ante un Melitón Hernández vencido por un tropiezo en el área chica.
El resultado final fue un empate 1-1, y los queretanos lograron rescatar un valioso punto en la casa del equipo veracruzano que se en ese momento disputaba el liderato de la tabla general y acabaría tercer lugar del campeonato.
La segunda ocasión que Ronaldinho pisó el Estadio Luis 'Pirata' Fuente fue aún más significativa. Ambos equipos se encontraron nuevamente en los cuartos de final del torneo.
El Querétaro, dirigido por el experimentado técnico Víctor Manuel Vucetich, se había colado de último momento en la fiesta grande y se enfrentaba a un Veracruz que vivía la emoción de tener un juego de liguilla en casa después de más de diez años.
El ambiente en el estadio era electrizante, y la afición veracruzana estaba más enganchada que nunca con su equipo. Sin embargo, el destino tenía preparado un desenlace trágico para los escualos.
Dos gravísimos errores del portero Melitón Hernández costaron los goles que significaron la eliminación de Veracruz. El encuentro terminó empatado 2-2, pero el Querétaro avanzó a las semifinales con un global de 4-3.
Uno de esos goles fue una obra mágica de Ronaldinho, quien en un tiro libre desde larga distancia, sorprendió a Melitón y no logró hacerse del balón, resbalándosele de entre las manos hacia su propia meta.