Veracruz | 2022-07-13
Históricamente los Institutos Tecnológicos estatales a lo largo del territorio veracruzano se convirtieron en un botín y agencia de empleos en los gobiernos anteriores que tuvieron las siglas del PRI y del PAN.
Es más, hay quienes aseguran que cuando se crearon fueron pensados en buena medida, para aquellos políticos que estaban en la “banca”, por lo que era una manera de “jubilarlos” del sistema. Y según el argot priista, era su premio de consolación. La reserva de políticos que no tenían un “hueso”.
Curiosamente la mejor época del crecimiento de los Tecnológicos fue en la época del priista Javier Duarte de Ochoa, pues de acuerdo con datos duros las matrículas repuntaron, las certificaciones fueron una constancia y herramienta de reconocimiento a nivel nacional e internacional.
Pero al día de hoy se observa una decadencia a tal grado que el Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz informó que investiga a cuatro Institutos Tecnológicos Superiores (ITS) por replicar el esquema de la Estafa Maestra en 2019, razón por la que interpondrá cuatro denuncias.
Y es que Delia González Cobos, auditora general, confirmó que además de la investigación en contra del Instituto Tecnológico de Perote, que en 2019 y 2020 recibió un contrato del Instituto de Administración y Bienes y Avalúos (Indaabin) por 92.4 millones de pesos, de los cuales transfirió 90.1 millones a una empresa no localizable, hay otros tres que repitieron el mismo esquema.
Una problemática más tiene que ver con que las matrículas han disminuido de manera dramática en estos centros de educación superior que solían ser una gran opción sobre todo para los municipios rurales.
Un ejemplo es el Instituto Tecnológico Superior de Tierra Blanca porque sus alumnos hicieron presencia dentro y fuera del país llevando sus proyectos académicos y recibiendo este plantel un reconocimiento internacional.
En aquellos tiempos tenía una matrícula escolar de mil 300 alumnos y actualmente apenas supera los 300 y por si fuera poco también trae un problema de corrupción del director, Sidney René Toledo Martínez, quien no ha podido explicar, entre otras cosas, una compra de ropa interior con recursos públicos. Algo verdaderamente vergonzoso.
Sin duda, son temas que merecen toda la atención del secretario de Educación, Zenyazen Escobar García, quien parece estar más distraído en la construcción de su proyecto político que en lo que sucede al interior de los ITS.
Y por si fuera poco, parece que se preocupa más por acomodar a conocidos y amistades en dichos plante-les como titulares que en tomar el toro por los cuernos y sacudir el subsistema de los tecnológicos que tanta falta le hace ser reestructurados.
¿EN QUÉ MANOS ESTÁ LA EDUCACIÓN?
Cuentan que precisamente algunas autoridades municipales acudieron allá por inicio de año a tratar el tema de un Tecnológico con el flamante secretario de Educación.
El funcionario de la Cuarta transformación los recibió en su despacho, les invitaba a desayunar, pero mientras discutían la situación que priva en esa escuela, a los invitados se les quitaron las ganas de consumir alimentos junto con el ex stripper.
En medio de todo, las palabras altisonantes iban y venían en su conversación telefónica, y con quien en broma y en tono molesto, no dejaba de interactuar con “la ver…. Tu put… madr….” Entre otras expresiones.
Junto a él, como en un Palacio Real, su copero o mayordomo, de muy finos modales, le acomodaba el babero y le daba masaje en sus brazos, antes de que el titular de la SEV probara alimentos, pero sin dejar su florido lenguaje, a lo que las indignadas autoridades municipales que tratarían el tema de su Tecnológico prefirieron abandonar la oficina, más que decepcionados porque nunca pudieron entablar plática directa con el hombre que estaba muy ocupado en su llamada.
OTROS CASOS. CORRUPCIÓN HISTÓRICA
Un caso ejemplar fue el del Tecnológico de Pánuco donde del 2014 al 2018 tuvo el más grande saqueo de un instituto como éste en la entidad.
En noviembre de 2019, un año después de iniciada la presente administración, por mal uso de recursos públicos se interpuso denuncia ante la Fiscalía Especializada de Combate a la Corrupción, para quien resulte responsable en la Dirección del Instituto Tecnológico Superior de Pánuco, durante el período del año 2014 al 2018.
Jannette Martínez, titular de institutos tecnológicos, presentó la querella porque los recursos destinados para infraestructura y equipamiento del plantel ubicado en el norte del estado, que sumaron 76 millones 432 mil pesos, fueron desaparecidos.
De dicha denuncia nada se sabe. Ni siquiera si hubo recuperación del patrimonio o si a la fecha se ha castigado a responsables.
Un reportaje de Flavia Morales da cuenta que entre 2014 y 2019, “la Universidad Politécnica de Huatusco (UPH) y siete Institutos Tecnológicos Superiores (ITS) en Veracruz firmaron 31 contratos vía adjudicación directa con 11 dependencias federales por más de 800 millones de pesos. Los peritos concluyeron que las instituciones carecían de infraestructura para ejecutar los contratos de servicios, así que subcontrataron a decenas de empresas, algunas no localizables.
De esta forma entregaron casi el 90% de los contratos por un valor estimado de 700 millones de pesos”.
Los Tecnológicos bajo sospecha son Perote, Alvarado, Poza Rica, Tantoyuca, Jesús Rodríguez Clara, Pánuco, Cosamaloapan.
De todo esto nada se sabe. El secretario de Educación, Escobar García bien gracias. ¿Negligente o cómplice?