Veracruz | 2020-03-18 | Raymundo Jiménez
Este martes, alrededor del mediodía, entre Sayula y Ciudad Alemán fue ejecutado el comandante de la Policía Municipal de San Juan Evangelista, Raymundo Elmer Prior Reyes, exalcalde priista de Ixhuatlán de Madero, municipio huasteco que gobernó en el trienio 1995-1997.
También fue comandante de la Policía Ministerial de Acayucan en tiempos del exprocurador Emeterio López Márquez, cuando los hermanos Ponciano y Cirilo Vázquez Lagunes fueron ejecutados, uno en junio de 2006 y el otro cinco meses después.
San Juan Evangelista es una zona donde imperan los intereses e influencia de los medios hermanos del extinto cacique del sur, Abel y Erasmo Vázquez González; éste último, presunto líder de un grupo de ganaderos que se han manejado como “autodefensas” y que hace tres semanas realizaron una caravana desde Cosoleacaque hasta Las Choapas con gente armada a bordo de casi 500 vehículos.
Entre los antecedentes de Prior Reyes destaca que siendo alcalde de Ixhuatlán de Madero fue vinculado a la tortura y asesinato de los hermanos indígenas Rolando y Atanasio Hernández Hernández, detenidos por elementos de la entonces Dirección General de Seguridad Pública del Estado durante el desalojo de un rancho del ex alcalde priista Tranquilino Hernández Reyna. Este caso fue retomado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Recientemente se había desempeñado como comandante del IPAX en Acayucan, siendo relevado en diciembre de 2018 al cambio de la administración estatal.
“La Cuija”, como lo apodaban, era señalado como presunto operador del exfiscal regional en Acayucan de la exProcuraduría General de Justicia del Estado, José Roberto Sánchez Cortés, alias el “80” o “Huevochas”, ex jefe de “Los Z” y hoy presunto líder del Cártel Jalisco Nueva Generación en el sur de Veracruz.
Coincidentemente su ejecución se dio tres semanas después de haber sido liberado un familiar de los Vázquez González, detenido a principios de febrero pasado en León, Guanajuato, a donde habría huido al ser señalado en las Mesas de Coordinación para la Construcción de la Paz como presunto generador de violencia en el sur veracruzano, donde le atribuyen varios homicidios en la región de Acayucan y San Juan Evangelista.
Entre los crímenes que le imputan está el del Teniente Mariano Rodríguez Pérez, ejecutado en Acayucan el 6 de febrero de 2019 en supuesta represalia porque el militar retirado se habría resistido a transportar drogas y armas en las patrullas municipales.
Al momento de ser detenido en León, según versiones periodísticas, le fueron confiscadas dos armas largas tipo fusil calibre .556 mm; dos pistolas tipo escuadra calibre .380 mm y 35 cargadores abastecidos con 300 cartuchos útiles calibres .380, 40 y .556.
Sin embargo, el 24 de febrero, mediante un acuerdo de desistimiento de la acción penal, la Fiscalía General de la Repúblico lo liberó. De regreso a Veracruz, declaró que procedería legalmente en contra del gobernador panista de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez, pues acusó que sus guaruras y la Policía Municipal lo detuvieron de manera ilegal.