Veracruz | 2025-03-13
La tecnología ha alcanzado al sector restaurantero, pues con el fin de eficientar el servicio a los clientes, se han implementado robots en algunos establecimientos de la zona conurbada.
Aunque se dice que estos no ocuparán un puesto de trabajo, ya que solo es para agilizar el servicio, queda esa duda de que en algún futuro esto pudiera cambiar.
Al momento, se han implementado estos robots como exigencia ante las estrategias internas para las ventas.
Con esto, más de uno podría sentirse en la tablita por perder su fuente de trabajo, pero habrá que confiar en los dueños, de que solo es para una mejor experiencia y una integración a la innovación en el servicio.
La violencia de género contra las mujeres sigue persistiendo a pesar de las constantes campañas para erradicarlo, sobre todo en los ayuntamientos.
Veracruz no se podía quedar atrás, pues ocupa el segundo lugar dentro de la tercera circunscripción electoral, lo que nos indica que dentro de los gobiernos municipales hay una guerra o discriminación por ser de diferentes partidos políticos, pero sobre todo, por ser mujeres.
El problema se agrava en época de elecciones, pues esas agresiones se dan con propaganda, denigrándola y haciendo alusión a qué solo deben permanecer en casa y no ocupando cargos públicos. Esperemos que el panorama cambie.
Un nuevo caso de crueldad animal en Veracruz nos reafirma que no se avanza nada en cuanto a la concientización de este tipo de violencia, que vemos a los animales como simple objeto o cosas que no importan y que da lo mismo si viven o no.
El atropellamiento en dos ocasiones de un taxista a un perrito llamado "Chino", que solo se encontraba durmiendo en la acera, deja claro la falta de empatía hacia estos animalitos.
Con urgencia hace falta aplicar medidas más severas para proteger a estos seres indefensos, pues las que ya se aplican no están siendo suficientes.
Eso sí, también hay que implementar un cambio en las personas, que las nuevas generaciones no aprendan estos actos sádicos contra los animales, que no les dé por "jugar" a lastimar a un perro, a un gato, o cualquier otra mascota.
No hay duda que mientras no se haga algo en estos aspectos, la violencia animal persistirá por un largo tiempo.