Veracruz | 2022-12-15
El fatídico martes 13 –día que los supersticiosos aconsejan que “ni te cases ni te embarques”–, en su cuenta verificada de Twitter, el exgobernador Javier Duarte amenazó explícitamente al abogado Rodolfo Reus Medina.
Todo esto por dos entrevistas que sobre la inminente extradición de la señora Karime Macías Tubilla, ex de Duarte, el litigante concedió al diario porteño Imagen de Veracruz, de la familia Robles Barajas, muy estimada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
La información que proporcionó Reus Medina al medio impreso caló tan hondo en el exmandatario que sacó su furia, ya que desafortunadamente para él y la exprimera dama de Veracruz la extradición ha sido concedida y sólo está pendiente la petición de asilo político que en el mes de marzo de 2023 se resolverá en el Reino Unido, donde Macías Tubilla reside con sus hijos desde que a mediados de abril de 2017 fue detenido Javier Duarte en Guatemala.
Cegado por la rabia, el último exgobernador veracruzano surgido del PRI cometió un garrafal error pues, mañana viernes 16, el abogado Reus lo denunciará por amenazas en la Fiscalía General del Estado (FGE), lo que de seguro retrasará su preliberación ya que esta carpeta de investigación obviamente será judicializada por lo evidente de las amenazas y, además, tendrá que ver cara a cara en una Audiencia de Imputación a Reus Medina.
¿Quién asesora legalmente a Javier Duarte?, le preguntamos al agraviado, quien descartó que esa tontería la haya avalado su abogado defensor Pablo Campuzano, al que definió como un hombre de Códigos de Honor. Sin embargo, comentó que sabe que un exfiscal General de Veracruz lo visita frecuentemente en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, lo que sin lugar a duda se trataría de Luis Ángel Bravo Contreras, el primer titular del órgano autónomo encargado de procurar justicia que fue creado precisamente en el sexenio duartista. Y es que el segundo fiscal veracruzano, Jorge Winckler Ortiz, que sustituyó a Bravo Contreras en el bienio del exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares, actualmente se encuentra también preso pero en el reclusorio federal de alta seguridad del Altiplano, en Almoloya, Estado de México.
Sorprende este nuevo desliz legal de Duarte, pues casualmente el lunes 21 de noviembre pasado se quejó en el noticiero radiofónico del periodista Ciro Gómez Leyva de lo que llamó “chicanada judicial” de la FGE por vincularlo a proceso por desaparición forzada dos días antes de la audiencia que él tenía programada ante un juez federal de ejecución penal para poder acceder al beneficio de preliberación, pues aseguró que “ya cumplí más del cincuenta por ciento de mi condena –que fue de nueve años de prisión–, he tenido buena conducta, cumplo con el plan de actividades, pagué ya la multa, en el caso de reparación del daño no existe en mi caso, está en ceros, en fin, todos los requisitos que contemplaba”.
¿Dónde quedó aquél antiquísimo dicho sevillano que mal recitó en el tribunal de Guatemala: “Paciencia, prudencia, verbal contingencia, dominio de ciencia, presencia o ausencia, según conveniencia”?