Réquiem a don Hipólito Reyes Larios

Veracruz | 2021-08-09 | Raúl López Gómez

Luto en la grey católica del estado de Veracruz, y en todo el país por el sensible fallecimiento del Arzobispo de Xalapa, Monseñor Hipólito Reyes Larios, quien estaba por cumplir 75 años de edad este 13 de agosto.

El arzobispo estaba en espera de su jubilación y de que en el Vaticano se nombrara a su sucesor.

Las fuentes informativas xalapeñas, dieron a conocer muy temprano este domingo, que el Arzobispo murió de forma repentina al parecer de un derrame cerebral, datos que se corroboraron de forma oficial por el vocero de la Arquidiócesis de Xalapa.

Don Hipólito Reyes Larios, fue originario de ciudad de Mendoza, Veracruz, y se había consagrado desde muy joven por una carrera sacerdotal brillante, y quien se mantuvo siempre muy firme con todos los postulados de la iglesia universal. 

De manera sorpresiva y a días de que cumplir años, el arzobispo Hipólito Reyes Larios falleció víctima de hemorragia, así lo dio a conocer el vocero del arquidiócesis de Xalapa, José Suazo.

Nació el 13 de agosto de 1946 en Ciudad Mendoza, Veracruz. Realizó estudios en el Seminario Regional de Xalapa, Ver. Fue ordenado sacerdote el 15 de agosto de 1973.

Por invitación expresa, se licenció en Teología Moral en la Academia Pontificia Alfonsiana en Roma.

Su Ordenación episcopal fue el 13 de junio de 2000; su Alma máter fue el Seminario de Xalapa y su Ordenación sacerdotal el 15 de agosto de 1973.

En su larga trayectoria sacerdotal y episcopal siempre se mantuvo muy firme como defensor de los postulados de la iglesia universal, y de elevar la voz en los momentos necesarios de defensa de la vida, de los pobres, de los desamparados y de las causas más nobles y justas, con absoluto apego al cristianismo.

Las expresiones de fe del pueblo cristiano y de las diversas diócesis del país, se hicieron presentes con palabras de agradecimiento y de reconocimiento, a un hombre santo que consagró toda su vida a predicar el evangelio de Jesús de Nazaret, con mucha convicción y devoción de servicio a los demás. QEPD. Así las cosas.

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