Veracruz - Boca del Río | 2023-06-13
Se critica a los gobiernos de Morena de marginar a los periodistas críticos y se olvidan de la verdadera represión que existió en la época de Carlos Salinas de Gortari y del gobernador de Veracruz Patricio Chirinos y su poderoso secretario de Gobierno en el sexenio de 1992 al 1997 Miguel Ángel Yunes Linares.
Existen varias historias como la persecución y revanchas de tipo político que sufriera el periodista José Robles Martínez por apoyar a los opositores al invencible PRI del pasado. El acoso de las amenazas a los empresarios y comerciantes que se atrevieran anunciarse en sus periódicos, acciones ampliamente conocidas en aquellos tiempos que obligaron al periodista emigrar al extranjero. Eran los tiempos del autoritarismo salinista y que continuara con Ernesto Zedillo.
Cuando Yunes Linares era priista, pero al arribar Fidel Herrera al gobierno estatal emigró al PAN para refugiarse en los brazos del impresentable Felipe Calderón y las faldas de la maestra sindicalista Elba Esther Gordillo Morales.
Con motivo de la pasada celebración del día de la libertad de expresión es bueno recordar lo que se vivió en aquellos años.
Lo que sí ha cambiado afirma el periodista Aurelio Contreras son los tiempos en Veracruz y en el país. Los riesgos para ejercer el periodismo hoy en día son mayores, por lo que resulta más difícil acallarlos como se hacía en el pasado gracias al internet y las benditas redes sociales.
Un día escuchamos a alguien que dijo que la salud era la mejor inversión siempre y cuando el médico le atine, y en este caso no se trata de un médico sino de la indolencia del sistema de salud en Veracruz.
Y es que hay un joven de 17 años que lleva esperando más de una semana por una cirugía de pierna en el Hospital Infantil de Veracruz, y a pesar de que se trata de una operación de emergencia, urgencia es lo que no le ocurre a quienes lo atienden porque aunque el caso se hizo mediático hasta el momento no han dado una solución.
Parecía que por fin los alrededores de la zona de mercados en Veracruz empezarían a despejarse de tanto comercio informal, sobre todo en áreas como la avenida Miguel Hidalgo, donde ya han retirado a varios vendedores informales de las banquetas, lo que agradecen los peatones porque su presencia los obligaba a caminar sobre el arroyo vehicular.
Pero la desilusión aparece cuando en lo más intrincado de los alrededores del Unidad Veracruzana aparecen más comerciantes informales, es decir que sólo los trasladaron y los arrumbaron en las áreas más oscuras para simular una limpieza “de a mentiritas”.
Así trabaja Daniel Galindo en su Dirección de Mercados.