Veracruz | 2023-01-05
A diferencia del emperador romano Julio César, a quien se atribuye la frase latina “Veni, vidi, vici” (llegué, vi, vencí), el abogado regiomontano Hugo Gutiérrez Maldonado vino a Veracruz como titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), y vio, pero no consiguió vencer a la delincuencia organizada, sino que terminó solapándola.
Eso sí, el exjefe policiaco se fue con las alforjas llenas de dinero, como para no preocuparse por el futuro de sus siguientes generaciones. Y es que aparte de los contratos millonarios que asignó directamente a proveedores sospechosos que en los cuatro años que estuvo al frente de la SSP fungieron como presuntos prestanombres, ahora ha trascendido que durante su estancia en Veracruz se dispararon coincidentemente en la entidad la ordeña de gasolinas y gas licuado de petróleo (LP) a los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Sorpresivamente, el jueves 20 de octubre pasado, Gutiérrez Maldonado presentó por escrito su dimisión al gobernador Cuitláhuac García, agradeciéndole la confianza que le dio y expresándole que “como bien conoce mi situación personal, debo atender cuestiones personales que me reclaman e impiden seguir destinando todo el tiempo que este encargo demanda y he preferido entregarle buenas cuentas con la finalidad de que Veracruz siga en la ruta de mejorar cada vez más la seguridad de la sociedad, por lo que he tomado la decisión de presentarle mi renuncia…”
Sin embargo, según cifras oficiales de Pemex, hasta el tercer trimestre de 2022 (julio-septiembre) se habían detectado en el país mil 882 tomas clandestinas para robar gas LP, cifra que representa un aumento de 9.86 por ciento respecto a igual periodo del año 2021.
A través de una solicitud de información, Pemex respondió al diario La Jornada que en los primeros nueve meses de 2022 fueron detectadas 169 perforaciones más en sus ductos en comparación al año antepasado.
Entre enero y septiembre del año pasado, el robo del energético que es utilizado en ocho de cada 10 hogares del país se concentró en ocho entidades de la República Mexicana, destacándose Puebla, Veracruz e Hidalgo.
A su vez, el presidente de la Asociación de Distribuidores de Gas LP, Luis Landeros Martínez, declaró al diario capitalino que este ilícito es cada vez mayor, pues hasta hace tres años sólo se hacía una perforación por día y en la actualidad llegan a ser siete.
De acuerdo con Landeros Martínez, mientras en un estado se baja el número de tomas clandestinas, por acciones emprendidas por las autoridades, los delincuentes migran hacia otras partes para seguir con el hurto.
Y señaló que lo anterior se observa en Veracruz, donde la cantidad de puntos donde se sustrae el gas LP pasó de 25 a 357, es decir, avanzó mil 328 por ciento frente a los primeros nueve meses del año antepasado, casualmente cuando Gutiérrez Maldonado aún estaba al frente de la SSP del estado.
¿Alguien debería sorprenderse ahora porque esos grupos delincuenciales sigan ejecutando a policías, funcionarios y autoridades municipales, que son las más vulnerables?
¿Por qué no llaman a cuentas al exfuncionario policiaco?