| 2025-03-26
Las historias de alcaldes, síndicos, tesoreros y directores de obras con problemas legales por incurrir en daño patrimonial son demasiado frecuentes. Prácticamente no hay ayuntamiento sin observaciones por el manejo inadecuado de los recursos públicos o por irregularidades en la ejecución de la obra pública.
El informe de seguimiento correspondiente al periodo 2017-2023, del Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz (ORFIS), por ejemplo, indica que, derivado de la revisión a la cuenta pública de 2023, se iniciaron 255 procedimientos de investigación, de los cuales 172 corresponden a entes municipales.
A cuatro ayuntamientos veracruzanos—Citlaltépetl, Cuitláhuac, Mixtla de Altamirano y Tehuipango—se les determinaron sanciones por irregularidades en la cuenta de 2023. Un año antes, en 2022, el ORFIS inició procedimientos de investigación sobre 187 ayuntamientos veracruzanos, de los cuales 10 derivaron en sanciones. Algo similar ocurrió en 2021, cuando se iniciaron procesos de investigación contra 183 ayuntamientos.
En general, son contados los casos de ayuntamientos que salen sin observaciones o sin presunto daño patrimonial en las auditorías realizadas por el Órgano de Fiscalización.
¿Qué sucede después de que el ORFIS presenta los resultados de las revisiones a las cuentas públicas? Básicamente, se abre un periodo de solventación de las observaciones que, en la mayoría de los casos, concluye con la "limpieza" de expedientes. En pocas palabras, no pasa nada; algunas amonestaciones y, en casos excepcionales, alguna denuncia penal.
Hoy podría ocurrir algo diferente: en el marco del curso "Veracruz y la Fiscalización: Capacitación para una Gestión Responsable 2025", el diputado presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, Esteban Bautista Hernández, destacó que la Comisión de Vigilancia tiene la indicación de no limpiar cuentas públicas. Es decir, si algún alcalde o funcionario municipal incurrió en mal manejo del erario, tendrá que atenerse a las consecuencias.
El legislador subrayó la importancia de la capacitación de los servidores públicos y destacó que el manejo de los recursos debe realizarse con eficiencia, responsabilidad y transparencia. En ese contexto, emitió una frase que resume a la perfección el sentido del trabajo fiscalizador: "Dignificar el papel del servidor público. La Comisión de Vigilancia tiene la instrucción de llevar las cosas con mucha honradez, ética y profesionalismo; nada de extorsionar a los municipios, nada de limpiar cuentas ni de recibir recursos a espaldas de los compañeros".
El Congreso local, en coordinación con la Contraloría General del Estado y el ORFIS, está impulsando un esfuerzo conjunto para capacitar a los servidores públicos en el adecuado y transparente manejo de los recursos, fomentando la rendición de cuentas.
El reto radica en imponer sanciones efectivas contra quienes desfalcan el patrimonio público. Veracruz tiene la oportunidad de demostrar que la fiscalización no es solo un trámite burocrático, sino una herramienta real para combatir la corrupción y fortalecer la confianza ciudadana en las instituciones, como lo apuntó el presidente de la Jucopo.
@luisromero85