Veracruz | 2022-06-16
No les resulta extraño que a los mejores exgobernadores del PRI que han terminado su gestión de primer nivel estatal durante esta administración federal de Morena, se les está dando la gran oportunidad de que trabajen como embajadores en diferentes partes del planeta donde México tiene una representación diplomática. Estos gobernantes han demostrado su capacidad y por ende el reconocimiento de las entidades que administraron con honestidad y buenos resultados. Los nombramientos diplomáticos los hace el presidente López Obrador para que no haya dudas sobre quien los integra.
Este equipo de eficientes ejecutivos estatales de otros partidos que se incorporan a la Secretaría de Relaciones Exteriores cuyo titular es Marcelo Ebrard, son gente que ganaron sus elecciones en los estados que gobernaron y tienen ascendiente y consenso con la ciudadanía local.
Para un especialista político en estos procesos previos a las elecciones diría que se están preparando para el 2024. De una forma discreta y de resultados ha sido la labor que ha desarrollado el canciller, sin duda el más destacado miembro del gabinete de la cuarta transformación que busca prolongarse.
El presidente Carlos Salinas nombró en su tiempo a dos veracruzanos el exgobernador Dante Delgado a Italia y al ex procurador general de la República Ignacio Morales Lechuga en Francia.
Morena necesita a Ricardo Monreal
Por más que insistan que Ricardo Monreal no se encuentra entre los presidenciales es de los fundadores de Morena siendo el político que tiene más tiempo al lado del presidente López Obrador y se conocen perfectamente, ambos en su natural rebeldía.
El propio mandatario lo buscó en una gira en Querétaro y le pidió, “necesito que sigas con nosotros”. Cuando alguien le preguntó si había excluido a Monreal para la presidencial, le respuesta fue contundente “para nada, a nadie.” Ahora que los legisladores de la oposición han querido declarar una moratoria constitucional a las iniciativas de AMLO, el que las puede sacar es precisamente el zacatecano en la Cámara de Senadores, tiene talento para negociar con los opositores.
Alejandro Moreno quiere ser el sepulturero
‘Alito’, dirigente nacional del tricolor, no acepta la petición generalizada de los expresidentes del PRI para que renuncie a ese cargo directivo por los pésimos resultados, ya que el partido se queda con solo dos gubernaturas, mismas que lo más seguro es que pierda el próximo año y con ello quede totalmente desfondado el partido que dominara el país durante 70 años.
Solo dos líderes no le pidieron su renuncia, Jorge de la Vega Domínguez y Augusto Gómez Villanueva, los decanos del viejo y agonizante Revolucionario Institucional.
Para continuar con la fama adversa de rateros están formando cola los exgobernadores del PRI César Duarte de Chihuahua, Francisco García Cabeza de Vaca de Tamaulipas y el propio dirigente nacional.
La permanencia del denunciado “Alito” es condenar a la desaparición de dicho instituto que ya ha perdido el registro en varios estados y en el caso de Veracruz ya anunciaron varios de los políticos que fueron candidatos a la gubernatura y hasta exsenadores, la inminente salida de sus filas.
Para una gran mayoría de los militantes les da pena que les digan que son priistas.
El PRI y el PRD desde hace tiempo se encuentra desahuciados y en terapia intensiva.
Nadie quiere cooperar para las esquelas.