Coatzacoalcos, Ver. | 2022-03-30 | Eduardo Izquierdo S.
El que de plano “regó el tepache” fue Erick Hernández Cerino, a quien al parecer se le olvidó que el que manda en la cancha es el árbitro y nadie más, y como FIEL “EMPLEADO” acató una orden del entrenador, José Ribón Zárate y suspendió el partido entre el equipo de éste, Joriza, y Restos 77 en el campo Paraíso el fin de semana, con el marcador a favor de los primeros.
Erick permitió que el partido se le saliera de control y cuando quiso aplicar “mano dura” ya era demasiado tarde, pues su INCAPACIDAD y FALTA DE CRITERIO provocaron que sacara dos cartones rojos innecesarios a Restos 77 (uno de ellos por cierto con el nombre equivocado en su reporte arbitral) y de ahí el borlote que según él, ponía en peligro su integridad y el pretexto para decir “basta, se acabó”.
Sin embargo, uno de los alumnos “más avanzados” de Julio César Peralta, mandamás de los silbantes, sólo se escudó en ese argumento para no SEGUIR EXHIBIÉNDOSE con el silbato, ya que él mismo reveló a RASO y COLOCADO que el que le pidió o MEJOR DICHO, ORDENÓ SUSPENDER EL ENCUENTRO fue JOSÉ RIBÓN ZÁRATE, timonel del once que estaba ganando.
La razón no se sabe, lo que sí DA RISA es que el que se supone debe ser la MÁXIMA AUTORIDAD DENTRO DEL TERRENO DE JUEGO, termine asumiendo EL PAPEL DE SERVIL en un partido que prometía mucho por la fuerte rivalidad entre ambos conjuntos.
NEPOTISMO
Y según una fuente, conocido empleado de la CONADE originario de este puerto tenía no a uno, sino a dos de sus hijos laborando en la COMUDE, asignados al campo “Hernández Ochoa”.
Desafortunadamente para él ambos fueron dados de baja, lo cual al enterarse provocó su furia, al grado de insultar a uno de los responsables del citado inmueble.
Pero ahí no acaba todo, pues de acuerdo a la misma fuente, uno de ellos ingresó a la nónima a su novia como “aviadora”.
En la Alameda Deportiva no “cantan mal las rancheras”, ya que ahí también, el coordinador de eventos de la COMUDE, dicen, tiene en la nómima a su yerno (mantenimiento), a su entenado (gimnasio) y un amigo en otra área de ese escenario.
Esto lo reveló personal de la misma Alameda Deportiva.
SE DISCULPA (DESCANSO)
Juan Daniel Jauregui, el popular “Zague”, dijo estar arrepentido de haber agredido al silbante Bernardino Rangel, en un partido del futbol regional entre Deportivo Allende y Tigres de Segovia de la categoría Más de 50.
Juan Daniel reconoció que perdió la cabeza y se dejó llevar por el calor del partido, pues su reacción ante una decisión arbitral no fue la adecuada y solo provocó que lo expulsaran del encuentro y de ahí, enojado arremetiera contra el árbitro asestándole un puñetazo en el ojo derecho.
Aclaró también ue no jugó como “cachirul”, porque no estaba registrado con ningún equipo y las facilidades que da la Liga, criticadas por cierto por algunos delegados, le permitieron poder ingresar.
Ahora solo resta saber cuál será el castigo final que impondrá este circuito a Juan Daniel, ya que por el momento solo lo tien-e fuera de circulación.
Nos vemos SDQ.