Veracruz | 2020-08-17 | Silverio Quevedo
En el municipio de Papantla todo indica que sus actuales representantes populares tienen distintas prioridades.
Ambos de Morena, con un partido que se ha distinguido por recoger el sentir ciudadano y tratar de darle cauce en un conjunto; ambos con ideología de la Cuarta transformación, pero con rumbos y vertientes muy extremas.
Y es que el diputado local, Eric Domínguez lleva días recorriendo y apoyando las zonas afectadas por la lluvias que cayeron en su distrito desde el pasado fin de semana, pues al menos así los demuestran las fotos que postea en sus redes sociales a fin de conocer y gestionar las demandas por estas afectaciones.
Mientras que por otro lado, el legislador federal, Jaime Humberto Pérez Bernabé se la ha pasado en “grillas”, realizando proselitismo en la misma zona del Totonacapan.
Con política superficial, vana y sin ninguna profundidad de tema o intención social.
La comparación es una y otra vez hecha por los grupos morenistas tanto de la zona como de la capital del estado debido a la actitud de ambos personajes.
Domínguez Vázquez por ejemplo, ha visitado por tercer día consecutivo las regiones del Totonacapan afectadas por las intensas lluvias provocadas por el paso de las ondas tropicales 25 y 26 que dañó severamente diversas comunidades de los municipios de la zona.
A Humberto Pérez Bernabé, en cambio, lo mueve la ambición política de cara a la renovación de la dirigencia estatal de su partido, MORENA, y se promociona incluso con reuniones aunque se escuda en que no pone en riesgo de salud a los militantes porque son grupos reducidos, en plena pandemia y contra las indicaciones que amerita la contingencia.
Estos hechos han sido criticados por las filas morenistas, pero también por quienes le dieron la confianza y hoy con los ciudadanos afectados por el temporal.
En la otra cara de la moneda, dicen, está Domínguez que entrega apoyos a las familias afectadas en su patrimonio. Desde mediados de la semana pasada ha socorrido a los pobladores de Coyutla y Filomeno Mata, donde ha realizado gestiones para apoyar a sus paisanos ante la complicada situación.
Junto con la secretaria de Protección Civil, Guadalupe Osorno Maldonado, estuvo en las zonas más afectadas y comprometió, con el respaldo del Gobierno de Veracruz, sumar esfuerzos para reparar los daños a las propiedades.
Un ejemplo y donde los estragos de los daños por el temporal fueron más crudos, es la comunidad Comalteco, en el municipio de Espinal, en donde el legislador gestionó recursos para atender las afectaciones, luego de caminar por ese lugar con funcionarios estatales.
En cambio, ponen en la balanza a Pérez Bernabé quien también visitó la región pero para realizar proselitismo político junto con algunos de sus homólogos, quienes lo respaldan en el proceso de renovación del Comité Directivo Estatal del Movimiento de Regeneración Nacional.
Apenas la semana anterior, diputados federales y locales de Veracruz cercanos al delegado de los programas del Bienestar en el estado, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, encabezados por Pérez Bernabé, se pronunciaron a favor de Mario Delgado Carrillo para renovar la dirigencia nacional de ese partido.
En tanto, las necesidades que apremian entre la población se quedan de lado, cuando es el principal activo y el discurso que emana de la ideología morenista. En el norte de Veracruz este decálogo está en tela de duda y generando el desencanto popular.
MUY EN CORTO
EXHIBEN MAGISTRADOS CARENCIA LEGISLATIVA. El primer revés y que evidenció al Poder Legislativo, tras haber removido a seis magistrados del Poder Judicial, en algunos de los casos bajo el argumento de que existe la Ley de retiro forzoso a partir de los 70 años, fue el caso de Marco Antonio Lezama Moo quien gestionó –y consiguió- que la justicia federal apercibiera al Poder Legislativo de Veracruz.
Esto para que el Congreso cumpliera la suspensión de los hechos (la remoción o retiro) dictada por un juez de distrito.
El otro caso que parecer ser un hecho en contra y por el que los diputados han sufrido otro palo es también es el del magistrado Roberto Dorantes Romero, quien ya había ganado, por cierto, un amparo para no ser retirado de su cargo.
Y de igual forma, de manera oficiosa y sin esperar que el poder judicial notificará al Ejecutivo que había una vacante de magistrado se actuó para reemplazarlo; no obstante que el Congreso no podía actuar de manera oficiosa máxime cuando también ya había un amparo resuelto precisamente a favor del magistrado Dorantes.
En resumen no le podían aplicar la ley en efecto retroactivo pues cuando a él lo nombraron como magistrado no existía la ley de retiro forzoso a los 70 años, en la que se basa el Congreso Local para realizar los movimientos que los han dejado mal parados.
El presidente de la Junta de Coordinación Política, Juan Javier Gómez Cazarín se había anotado varios hitazos pero parece que con estos ponches se pone en riesgo el partido.
Lo más grave es que se prenden focos rojos en el caso Jorge Winckler, asunto del que más vale no se confíe a pesar de la última notificación del Poder Judicial federal.
Si no quieren más sorpresas deben revisar muy a fondo que está pasando en sus estrategias jurídicas.