Veracruz | 2022-02-09 | Paulina Ríos
La declaración del Gobernador Cuitláhuac García Jiménez encendió las redes sociales el lunes, al informar que derogar el delito de ultrajes a la autoridad implicaría dejar en libertad a 40 jefes de plaza y es que después de la conformación del “Movimiento por la Justicia en Veracruz” que anunciaran el sábado, líderes opositores desde Plaza Lerdo, exigiendo –entre otras cosas- la desaparición de dicho delito, esa fue la defensa.
“Tenemos 40 jefes de plaza de la delincuencia organizada detenidos por ultrajes. Si van a defender a todos los detenidos por ultrajes, van a estar defendiendo a estos delincuentes (…) Si se deroga el delito de ultrajes alguien tiene que responder por si quedan libres estos jefes de plaza” dijo tajante Cuitláhuac García.
Lo dicho, ha exhibido terriblemente el trabajo de la Fiscalía General del Estado, toda vez que mantener a “jefes de plaza” por un delito diverso al cometido, muestra total incompetencia, irresponsabilidad, ignorancia y falta de profesionalismo, puesto que, el delito de ultrajes a la autoridad, si bien justifica –con la reforma reciente- la medida cautelar de prisión preventiva, no se trata de un delito que se deba imputar a un líder delincuencial.
Es decir que, al fenecer la medida cautelar máxima de prisión preventiva oficiosa por dos años, si la fiscalía no logra demostrar que los recluidos cometieron el delito de ultrajes, éstos de igual forma quedaran en libertad y jamás existirá un antecedente de que, su estadía en prisión, fue por la comisión de delitos de alto impacto como es el caso de líderes delincuenciales, sicarios o jefes de plaza.
La ineficacia de la Fiscalía radica en la incapacidad para imputarles ante el Juzgado de Control los delitos motivo de su aparen-te actividad ilícita, es decir contar con las pruebas necesarias para que además de ultrajes le puedan imputar otros delitos, entre ellos hasta delitos federales que impliquen un trabajo serio, responsable y profesional.
¿Cómo es posible que a delincuentes tan peligrosos como líderes o jefes de plaza les imputen ultrajes? Y lo peor que quien encabeza la Fiscalía engañe al Gobernador de esa manera aprovechando, que éste no es abogado. De verdad es preocupante lo que ocurre y lo que ha expresado ayer el titular del Poder Ejecutivo, mal asesorado y “arrojado al ruedo” sin respaldo alguno, con una declaración tan endeble.
Jefes de plaza con simple imputación de Ultrajes es realmente preocupante. Más allá lo es, que Fiscalía este imputando otro delito diverso al cometido. Lo congruente es que, sí además de ser líderes delincuenciales, agredieron a la policía, la fiscalía les impute o les acuse de ese y otros delitos como homicidio o narcomenudeo y así no preocuparía que, en caso de la derogación de ultrajes, dichos delincuentes queden libres, porque tendrían abiertas otras carpetas por los otros delitos motivo de la detención, que les significaría continuar en precisión.
De ello, como ya es costumbre, la Fiscal General del Estado, no ha salido ni a defender al Gobernador, ni a puntualizar o explicar el trabajo de la dependencia a su cargo, que según detiene a líderes peligroso y a la hora de presentarlos al Juez de Control les imputa un delito diverso y menor al supuestamente cometido. Ojalá que pronto la funcionaria de una explicación congruente de la absurda justificación entregada al titular del Poder Ejecutivo.
Por ahora diversos juristas, allá en territorio veracruzano, se han dicho indignados por lo expresado, asegurando que lo único que se confirma con lo declarado el lunes, es la fabricación de delitos llevada a cabo por la Fiscalía General veracruzana. Tema que seguramente seguirá dando mucho de qué hablar, más aún con el movimiento de líderes opositores que tienen éste y otros temas bajo la lupa.