Veracruz | 2023-07-27
Pasaron 17 días desde que el presidente Andrés Manuel López Obrador, a pregunta expresa de la corresponsal del periódico Imagen de Veracruz, Tere Mora Guillén, invitó al secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, a renunciar a su cargo si deseaba participar en las elecciones del 2024 o retirara toda la publicidad personal que tenía distribuida a lo largo del estado en bardas, anuncios espectaculares y hasta camiones del servicio de transporte público urbano.
En todo este tiempo el funcionario estatal hizo de lado el consejo presidencial al que se sumaron diputados locales de Morena y el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, quien es su jefe directo.
Sin decir mucho, demostró su soberbia y hasta el día de hoy sigue en campaña abierta, mientras en el estado la estabilidad interna, que debería ser su función en el gabinete, cada vez es más frágil, basta con mirar los hechos recientes en el norte del estado, inmerso en la violencia y el descontento social.
En medio de todo esto, con una posición tan clara y directa del presidente Andrés Manuel López Obrador, se esperaría que Eric Cisneros caminara solo en el desacato y el desdén del consejo presidencial.
Sorprendentemente no es así, el secretario de Gobierno tiene comparsa que lo acompaña y alimenta su ego de cara a la carrera electoral del 2024.
Uno de sus paleros se encuentra en esta zona conurbada de Veracruz. Se trata del alcalde de Medellín de Bravo, Marcos Isleño Andrade, quien a través de sus redes sociales hace segunda al secretario de Gobierno, promocionando su imagen a pesar de todo lo antes mencionado.
Isleño, por ejemplo, presumió la asistencia de Eric Cisneros a las fiestas patronales de Totutla el fin de semana, en donde presentó su libro “La negritud en Veracruz”.
Así, mientras el presidente López Obrador, el gobernador, diputados de Morena y el dirigente estatal piden parar la promoción del funcionario, sus alfiles y él mismo, siguen.
En el caso particular del alcalde, llama la atención que es uno de los directamente involucrados en la permanencia de la empresa concesionaria Grupo MAS y el conflicto laboral que mantiene en un plantón a empleados del extinto SAS desde hace más de 50 días en el municipio de Medellín.
El asunto sale a colación porque fue otro de los temas que el Periódico Imagen de Veracruz llevó a la conferencia mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador y en el que, indirectamente, Isleño está involucrado.
Si bien el edil afirma que mantiene una lucha legal para cancelar la concesión a la empresa privada y atender las exigencias del Sindicato Teniente José Azueta, cuyos miembros quedaron desempleados, en la práctica los mismos exobreros dicen lo contrario, luego de que este llevó al Congreso del Estado la petición para ratificar la concesión del servicio de agua a otra empresa privada.
El presidente López Obrador dijo en la mañanera del lunes 24 de julio que el tema del agua en Veracruz y Medellín se revisaría, que se atendería la exigencia de los empleados que quedaron desamparados, invitó también a las autoridades locales a atender el tema en el ámbito de sus competencias.
Pero si el alcalde de Medellín no atendió el exhortó que el mandatario estatal hizo para que no se promocionara la imagen del secretario de Gobierno, ¿Por qué esperaríamos que en este otro asunto sí tome cartas en el asunto?
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