Veracruz | 2022-12-14
Quienes conocen al presidente Andrés Manuel López Obrador desde que encabezaba el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD, no se sorprendieron del “encuestazo” que acaba de dar su partido Morena a los aspirantes a la gubernatura de Coahuila.
Perredistas veracruzanos que coincidieron con él como dirigentes del partido del sol azteca recuerdan, por ejemplo, que en la sucesión municipal de 1997 dio instrucciones al encargado de realizar los sondeos de opinión en el CEN para que especialmente en el municipio de Xico resultara como el aspirante mejor posicionado en las preferencias electorales el profesor Juan Manuel González Gálvez, un luchador social muy estimado por él que fallecería seis años después, en julio de 2013.
En 2018 se la aplicó también a Ricardo Monreal, quien como alcalde de Cuauhtémoc estaba muy bien posicionado en las encuestas para la Jefatura del Gobierno de la Ciudad de México. Sin embargo, López Obrador decidió que la candidata de Morena sería la alcaldesa de Tlalpan, Claudia Sheinbaum, y le diseñaron una encuesta a modo.
“En 2017 aspiré a ser jefe de Gobierno, yo creo que gané la encuesta pero no gané la decisión de quien toma las decisiones”, acusó Monreal este jueves 8.
En esa ocasión, como líder de Morena, López Obrador maniobró para que fuera el Consejo Nacional del partido guinda el que determinara que Sheinbaum había ganado la encuesta, lo que provocó las quejas de Monreal.
Además del ahora líder del Senado, otro de los que aspiraban hace cuatro años al gobierno capitalino era el entonces senador Mario Delgado, actual dirigente nacional de Morena, quien paradójicamente este lunes le recetó el mismo “encuestazo” al subsecretario de Seguridad Pública federal, Ricardo Mejía, quien enojado por el resultado a favor del senador Armando Guadiana, anunció por las redes sociales a sus seguidores que va controvertir el proceso por desaseado, “vamos a hacer valer todas las herramientas políticas a nuestro alcance, y les pido que estemos de manera pacífica, responsable, movilizados, actuantes, compartiendo información”.
Mejía, relegado hasta el tercer lugar de los aspirantes encuestados, descalificó el proceso al considerar que es imposible que en la medición de Morena sólo lo conozca 26 por ciento de la población, cuando las encuestas que él contrató lo ubican con un grado de conocimiento de 50 a 60%.
“Los que estamos de este lado somos los que defendemos a López Obrador y a la 4T”, afirmó Mejía Berdeja. Sin embargo, ayer se filtró un audio de su asesor jurídico Oscar Guardiola, quien además de despotricar con palabras altisonantes en contra del presidente afirmó que el proyecto político del subsecretario seguirá y que disputarán la gubernatura de Coahuila por otro partido.
Al responder sobre la inconformidad de Mejía y sus seguidores, López Obrador desestimó ayer que este desencuentro vaya a generar un problema interno en Morena de cara a las elecciones a gobernador en 2023. De cumplirse su premonición, ¿repetirá el método del “encuestazo” en la sucesión presidencial de 2024 y en los estados que en ese mismo año renovarán gubernaturas, entre ellos Veracruz?