Veracruz | 2021-02-19 | Arturo Reyes Isidoro
En un padrón electoral con una lista uninominal de 5 millones 911 mil 310 ciudadanos (al 15 de enero pasado), ¿qué tanto significan 12 mil?
En comparación, la cifra realmente es menor viéndola fríamente, pero seguramente no opinan lo mismos quienes decidieron buscar una candidatura independiente para participar en el proceso electoral, ya sea a diputados locales o a presidentes municipales.
El miércoles, el exrector de la Universidad Veracruzana, Raúl Arias Lovillo, quien aspira a ser candidato independiente a la alcaldía de Xalapa, expresó la posibilidad de que no pueda reunir las 12 mil firmas necesarias para obtener su registro.
En su muro de Facebook, publicó: “Nuestra Plataforma Ciudadana ha demostrado tener el mejor proyecto para Xalapa. Aunque probablemente no alcancemos a reunir las 12 mil firmas, de muchas maneras ya hemos influido positivamente en el próximo proceso electoral”.
Sin hacer menos a otros que aspiran de igual forma, si el académico, una persona con alto nivel de preparación, con buena capacidad de trabajo, sin mala imagen por deshonestidad, conocido en la capital del Estado, expresa sus reservas de obtener las firmas necesarias, en qué situación estarán los demás aspirantes.
Recién conversé con el exdiputado federal Uriel Flores Aguayo, ahora precandidato de Podemos, también a la alcaldía xalapeña, y me expresó lo difícil de participar como independiente. Originalmente él había optado por esa vía, hasta que el nuevo partido le llenó la expectativa y se adhirió a él.
Lo interesante es que habiendo tantas opciones, ahora 14 partidos en la contienda, ninguno llene a quienes han decidido intentar ir sin partido, a quienes los ahogan los requisitos legales para lograrlo, además de que no tienen derecho a ninguna financiación.
El martes, Arias Lovillo denunció un obstáculo más. En su misma cuenta de Facebook informó: “En la zona de ‘El Sumidero’ fue expulsado por personas no identificadas, uno de nuestros auxiliares que recogía firmas. Para no exponerlo retiramos nuestro módulo. Al mismo tiempo nos informan que hay grupos que recogen credenciales de elector por 500 pesos. Se lucra con la pobreza”.
¿Quién patrocina a esas personas no identificadas? ¿Quién tiene la capacidad económica para estar pagando ya 500 pesos por cada credencial de elector, una forma de asegurar el voto para algún candidato y partido?
Por muy buen interés ciudadano que haya por participar, por ofrecer una opción distinta, sin ataduras a compromisos que no respondan al de los votantes, el mismo sistema electoral parece hecho para impedirle el paso a los candidatos independientes, y de pilón, en el trabajo de campo, los esperan verdaderos delincuentes electorales.
Crimen de Gladys y Carla, sin informe oficial
Concluye la semana sin que la Fiscalía General del Estado informe sobre el asesinato de Gladys Merlín y Carla Enríquez, ocurrido el lunes pasado.
Hasta ahora hay dos versiones ventiladas a la luz pública: la del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, quien lo atribuyó a “cacicazgos políticos locales”, y la de dos columnistas de medios de la Ciudad de México, que comentaron que fueron miembros de su propio equipo de seguridad, para robarle fuertes sumas de dinero.
El mar de especulaciones continuará hasta que no se dé un informe oficial. Para el gobierno es necesario que se haga, porque el gobernador vinculó el caso al proceso electoral, lo que es muy preocupante si resulta cierto.