Veracruz | 2023-11-17
Luego de que este lunes, el Consejo Permanente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) recibió por separado a las aspirantes presidenciales del Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez, y de Morena, Claudia Sheinbaum, en cuyo encuentro abordaron temas como la paz, la justicia social y la libertad de pensamiento en el país, dos días después, el miércoles 15, el presidente López Obrador solicitó presentarse en la reunión de los jerarcas eclesiásticos.
Esta es la primera vez, en lo que va del sexenio, que el mandatario se reúne con los 133 Obispos que integran la CEM, ya que, en 2019, sólo recibió a ocho de ellos en Palacio Nacional.
Al inicio de su administración, AMLO mantuvo una comunicación relativamente fluida con la jerarquía católica. Sin embargo, posteriormente la relación se enfrió y derivó en algunas tensiones, sobre todo después del asesinato de dos sacerdotes jesuitas en la Sierra Tarahumara, en junio de 2022.
La Iglesia Católica ha criticado abiertamente la estrategia de seguridad de la administración obradorista, a lo que el Presidente ha respondido con descalificaciones, acusándolos de olvidar las masacres y el “mátalos en caliente” de gobiernos anteriores.
El mandatario incluso ha demandado a los prelados seguir el ejemplo del Papa Francisco, en lugar de defender los intereses de la oligarquía mexicana.
Sin embargo, en un pronunciamiento, la jerarquía católica dejó en claro que ahora fue López Obrador quien solicitó reunirse con los Obispos. “El día de hoy (miércoles 15), el Presidente de la República Mexicana, Andrés Manuel López Obrador, solicitó visitar y encontrarse con los Obispos de México, los cuales se encuentran reunidos en la Asamblea Plenaria CXV”, reveló la CEM.
El encuentro fue cordial. “El Presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano lo recibió presentándole los temas que se están tratando en la Asamblea, como el problema de la descomposición del tejido social, el proceso para la construcción de paz y, de manera especial, se habló de la preocupación de la Iglesia sobre el problema humanitario de los migrantes en todo el país”, informó la CEM, pero señalando que “durante su intervención, el Presidente López Obrador habló de los temas que suele presentar en sus informes durante sus conferencias de prensa diarias sobre cuestiones de inversión extranjera, empleo, las remesas estabilidad económica, el problema de la drogadicción, entre otros, con datos muy optimistas”.
Ante el manifiesto escepticismo del Episcopado mexicano, bien vale preguntar si seguirán siendo útiles las conferencias mañaneras del Presidente. Y es que anteayer, el Subcomandante Moisés, vocero del EZLN, también desacreditó el valor de la palabra del gobierno en turno: “Pueden decir una cosa en un momento, y un minuto después dicen lo contrario. Ahí está por ejemplo la que dicen ‘mañanera’, que un día una cosa y otro día lo contrario. Pero, como da paga le aplauden, y contentos porque les da unas limosnas que ni siquiera sale esa paga de su trabajo, sino de lo que da la gente trabajadora a los gobiernos con los impuestos, que son como el ‘cobro de piso’ del crimen desorganizado”, recriminó.